¿Cómo está reduciendo el sector de las telecomunicaciones su huella medioambiental?
Por Joan Monrabá, director general de Colt Technology Services en España
En los últimos años, el sector de las telecomunicaciones ha emprendido varias iniciativas para reducir su huella medioambiental. Algunos de los principales objetivos son reducir las emisiones de carbono, el consumo de energía y la generación de residuos.
Los proveedores de telecomunicaciones están adoptando tecnologías más sostenibles, como fuentes de energía renovables, sistemas de redes inteligentes y hardware y software energéticamente eficientes para reducir el consumo de energía y las emisiones de carbono. Por ejemplo, las empresas de telecomunicaciones están invirtiendo en paneles solares, turbinas eólicas y pilas de combustible para generar energía renovable para sus operaciones. También están adoptando prácticas de construcción ecológica en sus oficinas y data centers para reducir el consumo de energía y las emisiones de carbono. Estas prácticas incluyen el uso de sistemas de calefacción y refrigeración eficientes, iluminación de bajo consumo y programas de reciclaje y reducción de residuos.
Muchas empresas de telecomunicaciones se han fijado objetivos para reducir su huella ecológica, como disminuir las emisiones de carbono en un determinado porcentaje o utilizar energías renovables para alimentar un determinado porcentaje de sus operaciones. Algunas empresas de telecomunicaciones han seguido centrándose en la sostenibilidad y las iniciativas medioambientales. Por ejemplo, algunas empresas han invertido en fuentes de energía renovables para reducir su dependencia de los combustibles fósiles, mientras que otras han implantado prácticas de construcción ecológica para minimizar su impacto medioambiental.
Como parte de nuestro compromiso con un futuro sólido y sostenible, Colt está suscrito a EcoVadis, un índice global que compara nuestro rendimiento medioambiental, social y de gobernanza (ESG) con el de más de 75.000 organizaciones de todos los sectores. Nuestra clasificación sectorial más reciente ha situado a Colt en el percentil 97, con una puntuación de 71. Esto nos ha hecho merecedores de una medalla de oro y un puesto en el 3% de las empresas de telecomunicaciones registradas por su rendimiento ESG.
En octubre de 2022, Colt obtuvo la calificación Gold del proveedor líder mundial de calificaciones de sostenibilidad, EcoVadis, por nuestro rendimiento medioambiental, social y de gobierno (ESG), y la calificación B del Carbon Disclosure Project (CDP) por el rendimiento medioambiental de la empresa. La estrategia a largo plazo de Colt es crear una red eficiente, ecológica y modular en la que la optimización de la red se inculque como una disciplina continua.
Trabajamos para conseguir el objetivo “Cero residuos al vertedero”. Esto significa que estamos haciendo un esfuerzo para garantizar que todos nuestros residuos, en la medida de lo posible, se reutilicen o se reciclen. Esto incluye los residuos de nuestros equipos de red, equipos informáticos, equipos de oficina y nuestra cadena de suministro.
En Colt, nuestro objetivo es una reducción del carbono del 47% para 2030 con el fin de cumplir la ambiciosa meta de limitar las temperaturas a 1,5 grados. Otro de nuestros objetivos es suministrar energía renovable y alcanzar un 75% de electricidad renovable para todas las sedes a escala mundial en 2023. Descarbonizaremos nuestra flota interna mediante la electrificación, y nos hemos comprometido a alcanzar una flota eléctrica del 75% para 2030, con un objetivo provisional del 38% para 2025.
Nuestro programa de sustitución de portátiles retira los activos obsoletos de la empresa, pero prolongamos su vida útil enviándolos a las escuelas locales, lo que también tiene un impacto más amplio en la Responsabilidad Social Corporativa y la inclusión digital.
Los nuevos dispositivos contienen un 65% de material reciclado postconsumo y son más eficientes desde el punto de vista energético. Se entregan en cajas fabricadas con un 75% de fibras recicladas y bambú, lo que significa una vez más que estamos prolongando la vida útil de materiales clave y reduciendo la necesidad de recursos vírgenes, lo que enlaza con el modelo de economía circular.
Seguimos adoptando tecnologías energéticamente eficientes para transformar nuestra infraestructura de red y los data centers de Colt DCS y mejorar nuestra eficiencia energética reduciendo las emisiones en un 28%. En nuestro enfoque, cuando sustituimos nuestros equipos por hardware nuevo, tenemos en cuenta todos estos aspectos para marcar la diferencia. Por ejemplo, a finales de diciembre de 2022, eliminamos todos nuestros equipos de red SDH (99,99%). No se trata solo de mirar a la próxima generación, sino también de analizar los procesos de nuestra organización para ver cómo podemos hacer las cosas de forma eficiente y conseguir una infraestructura más sostenible a largo plazo.