FinTech seguridad
Las Fintech llegan para quedarse,
pero su seguridad sigue en tela de juicio
Las Fintech llegan para quedarse, pero su seguridad sigue en tela de juicioLa irrupción de la tecnología en la vida económica se está convirtiendo en un auténtico desafío para las instituciones financieras tradicionales. El modelo de negocio ahora se orienta al usuario sea cual sea el servicio, optimizando los servicios de las entidades clásicas en favor de lo que la persona individual requiera.Las Fintech no son más que empresas financieras que han sabido ver la revolución que la tecnología les planteaba y la han aprovechado para mejorar sus servicios. Por lo general, manejan capitales más reducidos que las grandes financieras, y su gran público objetivo está centrado en la pequeña y mediana empresa. La cuestión, como en todo, es: ¿cuáles son las ventajas y los inconvenientes de las Fintech?
Ventajas:
– Las gestiones se automatizan y se hacen de una manera mucho más rápida, lo que permite ahorrar tanto tiempo como dinero, gracias a una mejor gestión de los costes. Los procesos, por lo tanto, son mucho más eficientes.
– Los intermediarios tienden a desaparecer, lo que redunda en un mayor control por parte de la empresa.
– La flexibilidad y la transparencia cobran un valor fundamental, permitiendo un manejo fluido y claro de la información y los datos.
– El análisis de los procesos es mucho más sencillo y real. Este hecho puede conducir a ventajas competitivas interesantes para las empresas.
Inconvenientes:
El gran punto en contra de las Fintech sigue siendo la seguridad. La disposición online de los datos y la facilidad para mover el dinero son los dos puntos que van a marcar la confianza falta de muchos de los usuarios, que ven cómo es posible que toda su información, de índole confidencial, puede ser fácilmente sustraída por terceros y utilizada con fines lucrativos; por no hablar de lo que podría ocurrir en caso de un robo de valor económico.
El esfuerzo de las empresas financieras basadas en modelos tecnológicos por actualizarse a nivel legal y resolver esta cuestión es evidente; un trabajo que se ve reflejado desde las mismas políticas de privacidad y bases legales de las Fintech. Las asociaciones con entidades bancarias tradicionales y con empresas especializadas en ciberseguridad están a la orden del día como una apuesta por lograr la confianza de los clientes y, en este sentido, ya se ha logrado controlar de manera fiable la información que estas entidades están autorizadas a reclamar en función de la relación que tenga con los servicios ofrecidos.
Los bancos, por su parte, también han adoptado varias de las medidas que las Fintech han introducido en el juego. A día de hoy, pese a que ha supuesto una disminución de poder para ellos, han entrado de lleno en la partida, logrando aumentar la confianza del cliente en la gestión de la parte económica.